Forms of non resistance (2019-2020)
"Forms of Non-Resistance” es un proyecto que forma parte de una investigación artística iniciada en 2017 en torno a los espacios de suspensión de la consciencia como mecanismos de búsqueda y/o formas de conocimiento y aprendizaje no cognitivos a través del cuerpo. Esta línea de trabajo se formaliza a través del análisis de diferentes deportes de contacto que, mediante lo experiencial, plantean formas de lidiar contra lo invisible, lo difícil de expresar o el inevitable fracaso ante el intento de controlar nuestros propios cuerpos.

“Forms of Non-Resistance” se configura como una serie de ejercicios físicos que parten de la práctica de las katas de artes marciales. La mayoría de las artes marciales orientales cuenta con dos ejes fundamentales en su desarrollo: el combate libre y las katas. Las katas, denominación que puede traducirse como “forma de hacer” son posturas y gestos que no sólo pertenecen al ámbito estos deportes, sino que pueden extenderse a las artes escénicas ya que, formalmente, albergan un alto contenido performático (la mayoría de ellas cuentan con títulos como si se tratasen de pequeñas representaciones teatrales). En este proyecto, la importancia de la práctica de las katas no sólo reside en ese valor performático y su naturaleza como canon (regla o precepto, estructura que dicta qué es lo correcto), sino también en su estrecha relación con la meditación en movimiento, planteándose en los tratados sobre deportes de contacto como un ejercicio que aumenta el nivel de conciencia en la persona que lo realiza.
El proyecto se formaliza mediante una instalación audiovisual compuesta por diferentes elementos tales como el vídeo, una publicación o una superficie a suelo. En el vídeo, la bailarina Andrea Pérez realiza una serie de movimientos y gestos que, a medida que pasa el tiempo, van articulándose como una coreografía improvisada donde el cuerpo marca sus propios ritmos y formas a través de la intuición y la pérdida de control como parte del proceso. Andrea, una bailarina formada en danza contemporánea, sólo ha podido acercarse a las katas a través del visionado de fotografías de judo y karate. La narración del vídeo se estructura en una primera fase, imitando los gestos de las katas; una segunda, repitiendo, fallando en los mismos; y una tercera “deconstruyendo” estos movimientos y llegando a diluirlos en gestos que no entran dentro de los códigos de las artes marciales, pero tampoco de la danza ortodoxa, conformándose así una coreografía alejada de la mera ejecución experta.

La pieza a suelo es un tatami técnico de Judo intervenido, por una serie de elementos que dan relieve a diferentes zonas de la lona y que, a su vez, está forrado con una lona que cuenta con motivos gráficos, esquemas de movimiento realizados durante la realización de la coreografía mostrada en el vídeo. Esta pieza está concebida para ser habitada por el espectador, de tal manera que para ver el vídeo de manera cercana hay que pisar, pasear, deambular por la superficie.
Proyecto realizado gracias a las Ayudas a la creación contemporánea 2019 de la Comunidad de Madrid